domingo, 12 de abril de 2015

NO DEJEN QUE LAS ESTADÍSTICAS ARRUINEN AL BÉISBOL


ESTIMADOS HERMANOS LATINOS:

ME PARECE MUY INTERESANTE Y DE SENTIDO COMÚN PARA EL FANÁTICO MUNDIAL, EL ABARCAR, INFORMAR Y EVALUAR OPINIONES SOBRE LA EVOLUCIÓN DE NUESTRO BÉISBOL EN SUS CONOCIMIENTOS Y ESPECIALMENTE SOBRE LA INFLUENCIA DEL SABERMETRICS, ES POR ESO QUE LES OFREZCO EL SIGUIENTE ARTICULO PUBLICADO EN EL NEW YORK TIMES.

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http://www.jaimecervantesperez.blogspot.mx/2015/04/no-dejen-que-las-estadisticas-arruinen.html
 
NO DEJEN QUE LAS ESTADÍSTICAS ARRUINEN AL BÉISBOL
By STEVE KETTMANN APRIL 8, 2015

Dr. Jaime Cervantes Pérez
Traducción y compilación

En esta semana se puso en marcha el béisbol de MLB, es algo especial ir a los parques y más estimulante llegar temprano, ver la práctica de bateo acompañado de una libreta y lápiz para penetrar a lo más profundo del juego, oír la musicalidad de un batazo que llega al outfield.  El béisbol tiene un lenguaje para que el fanático entienda y lo disfrute, que los datos que uno va captando se conviertan en un alimento de información y se llegue al BABIP (Batting Average on Balls In Play), que mide la frecuencia que va una pelota de hit, al FIP (Fielding Independent Pithing) es una medida de las cosas por las que el pitcher es específicamente responsable y el WAR (Wins Above Replacement) que es un intento de  sabermetric para sumar la contribución total del jugador hacia su equipo en una estadística.

Gracias al “Moneyball”, y al Fantasy Baseball las estadísticas han cambiado la forma de pensar y ver de los fanáticos.  En su conjunto es una tendencia positiva, pero no cuando los números empiezan a eclipsar una apreciación más matizada del béisbol.  Cuando vemos un duelo, digamos entre el pitcher del Mets Matt Harvey y el pitcher Giancarlo Stanton de Miami, el análisis estadístico es muy útil para apreciar el drama que vemos como cuando escuchamos un aria de Pavarotti (pieza musical creada para ser cantada por una voz solista sin coro).

Estar pendiente de los giros que da el juego es vital, ya que las suposiciones y sus improbabilidades que surgen durante el desarrollo dan un sabor muy especial en nuestro cerebro.  Estaba en octubre de 2001 en Oakland cuando el short stop Derek Jeter de los Yankees ganaron un juego y sin duda una serie de playoff contra el Atletics, por tener la previsión de anticipar un error de tiro y luego hacer un tiro a home plate  para dejar fuera a un pesado Jeremy Giambi que trataba de anotar.  El análisis estadístico nada tuvo que ver con esa jugada.

Los managers están de acuerdo, dice Bruce Bochy, manager del campeón San Francisco Giants en una Serie Mundial: “yo veo el juego”, “tú no me ves escribiendo o examinando las estadísticas, estas son cosas importantes, pero hay algunas cosas que no puedes ver en el esquema”

El verdadero problema no está en el dugout, está del modo de que es discutido un juego fuera del campo.  Yo crecí dentro de la información y se burlaban de los detalles de las acciones del juego, había algunos que nos daban una narración sabrosa y perspicaz, como la talentosa dada por el escritor Roger Angell así como para las decenas de reporteros cubriendo el juego en todo el país.  Por ahora hay grandes escritores, especialmente los jóvenes que consultan un desbordamiento de estadísticas y que no disfrutan del juego por estar viendo los números.

En cualquier sala de prensa casi todos los reporteros están escribiendo, enviando mensajes o viendo estadísticas de Google.  ¡Esto no funciona! Tú puedes ir a un concierto, oír la música de la Novena Sinfonía de Mahler, aun cuando te estés escribiendo con un cliente y cerrando un negocio, tus pulgares vuelan y tú tratas de no ser distraído por la mirada molesta de la persona que está junto a ti, ¿Realmente estás escuchando la música y disfrutándola?

La importancia de estar completamente atento al juego, despojado de distracciones, radica no en la sensiblería de la nobleza del béisbol, pero continuamente uno se profundiza para comprender y entender el juego, (aún Mr. Angell una vez quejándose dijo: “¡Las cosas que suceden en ‘El Campo de los Sueños’ me dan dolor”!).

El arte de batear una pelota comienza con vaciar la mente, Jonathan Fader, un psicólogo que trabaja con los jugadores del Mets, me dijo: “Esencialmente lo que nosotros estamos tratando de hacer en la psicología del deporte es ayudar a la gente a disfrutar”. 

Fanáticos y escritores necesitan adaptarse a una actitud similar, un enfoque excesivamente analítico centrado en la corteza cerebral es un mecanismo distanciador y no entender cómo los fanáticos y los jugadores conciben el juego.
 
No hay duda, ahora los General Managers son más jóvenes, educados, ponen la energía fresca en el béisbol y ejercen con más precisión las herramientas del análisis de las estadísticas, para replantear lo viejo del béisbol, a menudo puede ser entendido, aplicado y lograr fines excitantes.

Por ejemplo, el cambio de un pitcher relevista en un momento apremiante para apagar al contrario, sería más lógico con lo que tenemos de experiencia, que enfocarse en las estadísticas obscuras: el promedio de bateo contra los relevistas.  Tratando de decidir en la última temporada entre dos jugadores de bajo rendimiento, primeras bases, los dos zurdos con fuerza, los Mets decidieron que los números resolvieran quién sería el slugger más confiable: y concluyeron que, el que al batear su pelota saliera con más velocidad.

El problema no es con los números. La maravillosa BABIP (Batting Average on Balls In Play) mide la frecuencia con que va una pelota de hit,  Y el FIP (Fielding Independent Pithing) es un registro para todas las cosas por las que el pitcher es específicamente responsable, más específico que E.R.A. (earned-run average), (carreras admitidas por nueve innings).

Como los niños, los números por sí mismos son irreprochables.  Es como los usamos o como los mal usamos.  Hay un riesgo de que los números simplemente se vuelvan una finalidad y las estadísticas veladamente proliferen.

Una buena regla general efectiva es que más de una estadística se basan en la contemplación, lo menos probable es que vaya a ser consistentemente usada por una amplia audiencia.  Aún una vieja estadística como WAR (Wins Above Replacement), que tiene defensores y detractores, es un intento del sabermetric para sumar la total contribución de un jugador a su equipo en una sola estadística y se usa para comparar la actuación de un jugador con un hipotético.

El béisbol es pausado, con esa lentitud tenemos la oportunidad para dejar a la imaginación divagar y moverse junto con la acción.  Mr. Angell ha dicho que para él aún tarde en la vida, es como un fanático de la música que continúa tocando.  Si no podemos desplegar nuestra capacidad de atención lo suficiente para centrarse en la acción, si no sintonizamos con el béisbol en la forma en que captamos la música, nunca vamos a disfrutarlo.

PUEBLA, PUEBLA, MÉXICO, 12 DE ABRIL DE 2015